Este IM empieza hace un año, cuando me apunte. En ese momento estaba súper motivado, con muchas ganas de entrenar y de poder conseguir el reto. Hoy soy finisher, el camino ha sido largo (quizá demasiado), duro, pero ha valido la pena.
El día del IM me levanto a las 4.30 para desayunar algo y rápidamente taxi y para boxes. En el taxi íbamos Lourdes, Enric, Laia y yo. Había un silencio tremendo, muchos nervios. No es para menos, todo el año se resume en las 16h que dura la prueba.
Llegamos a boxes, yo reviso que todo esté correcto y veo que la rueda de atrás está un poco floja, así que la hincho. La pongo a la presión correcta y al sacar la mancha….. mierda, me he cargado el “pitorrillo” de la cámara ( otra vez igual que en Calella ). Cojo un ataque de pánico, me colapso y alguien dentro de mí se fue a avisar a los jueces para que me dejaran llevar la bici al mecánico. La jueza me dice que la bici no la puedo sacar, pero que la rueda sí. En ese momento Laia me grita “Aixeca la mà, que ve el mecànic!!” y yo como si estuviera en la escuela con los deberes hechos, levanto la mano. A los 5 minutos ya tenía la rueda arreglada y puesta (con la ayuda de Enric), pero el mecánico me dijo que fuese con cuidado que el neumático estaba un poco jodido y que a la mínima podía romperse ( no entendía nada, la bici había pasado la revisión y parecía que estaba todo correcto!!!!). En ese momento de mega crisis, pensé que todo había acabado, me resigne a pensar que no era mi día y que volvería otro año a intentarlo otra vez. Como no tenía más remedio me fui para salida de la natación. Estaba cagado de miedo, solo pensaba en empezar a correr, eso significaría que la bici había aguantado. En esos momentos te vienen a la mente imágenes y me vino la del neumático de Dani (un compañero del Gavà). El tio hace el extremMan de Salou con el neumático hecho mierda, así que yo también seré capaz.
Los momentos antes de la salida los comparto con Enric y Gerardo, menos mal que Gerardo es como es, y me hizo olvidar que estaba en un IM, porque os aseguro que tenía miedo. Miedo a no poder conseguir el reto, miedo a volver de Zúrich con un abandono, miedo a fallar a la gente que me estaba siguiendo, miedo a la maratón…. Miedo en general.
Una vez nos preparamos para salir, (último minuto), ponen la música de la salida, ves a 2000 gorros amarillos y piensas : “Joder, lo he conseguido, estoy en la línea de salida es mi momento, es mi día”. Se pone la piel de gallina y zasssss al agua.
En el agua todo controlado, el neopreno perfecto, no recibo muchos golpes , voy suave pero dentro del plan establecido. Hasta la primera boya había mucha gente, pero después pude disfrutar de la natación. Llegamos a la isla, donde damos la vuelta y un subidón!!! Ves a toda tu gente animando y la verdad que es uno de los mejores momentos. Hago la segunda vuelta sin problemas y en 1.27 acabo la natación. Cuando me estoy quitando el neopreno ya empiezo a pensar otra vez en la rueda, bici y me entran los miedos. Pero como dice Iván, “Que solo te preocupe, lo que tú puedes controlar, lo otro pues nada.”
Cojo la bici, y veo que me hace un ruido extraño y decido parar. Veo que es el cuenta kilómetros que toca con la rueda. Lo pongo bien, pero sigue tocando. Me vuelvo a parar, lo pongo otra vez y parece que deja de hacer ruido, pero … joder!!! Ahora no funciona el cuenta!!! Que desastre!!!. Para no perder más tiempo decido ir sin. Iré por sensaciones.
Empiezo los primeros 30-40km que eran llanos, y veo que no voy bien. Me cuesta mucho encontrar la pose, me cuesta pedalear, no es mi día en la bici. Lo único que puedo hacer es, no parar y tirar, tirar. Hago la primera vuelta en 3.10, aceptable. Cuando empiezo la segunda, vuelvo a ver que no voy, no sé qué pasa, pero las piernas no me van. Estaba muy agarrotado y no me pude aclopar casi nada. Un desastre. Los últimos 30km los hice con una lluvia increíble, viento en contra. Fue fatal, porque me castigue demasiado y luego sabía que lo pagaría. Dejo la bici en 6.50.
Es la primera vez que dejo la bici, y tengo muchas ganas de correr. Hago la transición rápida, para a echar una meadita y a correr una maratón!!!.
Al Km, me encuentro a Gerardo, que me dice que tire, que él va más lento. Tiro y me noto bien, muy bien. Los primeros 10km perfectos. Empiezo la segunda vuelta, veo a Iván y Dani eso me da mucha fuerza para seguir. En la segunda vuelta, solo paro en los avituallamientos, el resto corriendo. Empiezo la tercera vuelta y zasss. Me vino el hombre del mazo. (No sabía que el mazo era tan grande…)Me quede sin fuerzas, me maree, solo podía caminar. Hago 2km andando hasta el avituallamiento. Allí me encuentro muy mal, y estoy a punto de llamar al médico y retirarme. En esos momentos si la cabeza dice adiós, es adiós. Me pare, me tome un gel, naranja, plátano, coca-cola, agua, de todo un poco y continúe caminando 1km más. Sin duda el peor momento de la carrera, soledad, ves el objetivo lejos, me vi muy mal y sin ganas de seguir. Justo en ese momento me encuentro con Aurelio (del Gavà) y me empieza a decir que cabeza. “Alfons, ahora cabeza, tienes tiempo de sobras para acabar, pero cabeza. Anda un poco pero luego corre, que andar vicia”. Eso me hizo reaccionar (supongo que los geles también) y me entro un subidón que me permitió correr unos 5km más. Paso por el giro de la última vuelta y zass! Dolor de piernas a saco, no me deja correr. En ese momento, aunque parezca mentira es cuando me vi finisher. Quedaban 10km, tenia 4 horas de tiempo para hacerlos y Laia andando al lado mío. Parecía un paseo romántico por Zúrich, pero yo un poco cansado. Estuvimos andando toda la última vuelta hasta que en los últimos metros me pongo a correr para entrar con ella en la meta. La entrada fue muy fría, por una parte estaba muy contento, pero por otro no. Quería haber corrido más en la maratón. Pero lo que cuenta es la medalla que tengo bien guardada.
Las sensaciones en general son buenas, excepto que acabe con mucho dolor de piernas y sin ganas de volver a hacer una triatlón en la vida. Son casi 14 horas de soledad, tu luchando contra tu cabeza, tienes tiempo de pensar muchas cosas. En la bici, no paraba de preguntarme : “Que coño hacemos aquí!!! Esto es una agonía!””””
Corriendo era un sufrimiento increíble. No solo sufría yo. Las caras de los otros triatletas eran un poema. Claro que al final cuando pasan los días y te recuperas esto se olvida, pero para eso lo escribo, para que quede constancia. Esto del IM, es muy muy muy duro.
Creo que me he precipitado en hacerlo, creo que no he llegado en mi mejor momento, el último mes me ha sobrado, pero de todo se aprende.
Para acabar quiero dar las gracias a todos, en especial a los compañeros Zuricheños del Gavà. Este club es una pasada, este año he aprendido mucho y gracias a ellos he podido conseguir mi objetivo.
Lo de este club no es normal, es algo especial. Es muy bonito decirlo para quedar bien, pero os aseguro que cuando Lourdes apareció de la oscuridad, mi padre lloraba de ver como estábamos todos locos animando y gritando!!! Mi suegra, mi madre, mi suegro, todos alucinaban. El mejor momento del IM sin duda. Esa imagen nunca se me olvidará.
De los mejores momentos del IM, me quedo con el Stage del Rayo Team , la semana santa en Jaén y por supuesto el sufrimiento del día de la carrera y la llegada a Meta. Un IM, no solo es el día de la prueba. Los otros momentos también forman parte de él. Así que por esos momentos, es por lo que quizá el año que viene me apunte a Roth.
Gracias a todos los compañeros con los que he compartido series en la pista, salidas de bici, travesías en pantanos…. A los que me han enviado sms, mails.. a todos!!!! A cristina por animar como una loca y acompañar a Laia.
Gracias a Iván, por llevarme del Duet a Zurich. Pasar de hacer spinning en un gimnasio a hacer un IM en Zurich era una apuesta arriesgada, pero nos ha salido bien. Que calidad humana que tiene. En Zurich, me ha demostrado mucho.
Carlos, Lucy por compartir muchos entrenos y hacer que entrenar sea más divertido. Habéis sido mis compañeros de bici.
Aurelio, gracias por los entrenos de running y por el apoyo moral cuando peor estaba.
Lourdes, eres increíble. Mi IM, acabo cuando tu pasaste por el arco!!!!
Enric, gracies per la compañía a Zurich, aquella sortida que es va convertir en mitja marato!!! Jajaaj i per ajudar-me a posar la roda.
A Tusi, por los consejos de sabio, A David por darme ánimos en la carrera.
Gerardo, menos mal que estabas conmigo en la salida, sino me muero!!!!! Muchas gracias, me tranquilizaste y puede salir a nadar como una persona normal.
Dani, has sigut el mestre a la bici. He passat de no saber pujar-me a pegar-te “hachazos”, així que l’any que ve espabila!!! que patirem junts a Roth” Aquests any hem compartit molts moments. L’any que ve, “T’espero en la meta” ajajajajajja
Moltes Gracies Dani, ets un crack!
Gracias a la familia por venir a Zurich a animarme, vaya subidon verlos durante la prueba. Estaban en todos los sitios!!! Gracias a Albert y Mireia, por acompañarme en los últimos Km’s.
Y como no, GRACIAS a LAIA,el día antes acabo su primer triatlón Olímpico y el día del IM, hizo casi 15km conmigo. Después de estar todos los fines de semana del año sola en casa esperando a que llegara, sin tener ganas de hacer nada por estar cansado, por la paciencia que ha tenido y por todo … T’ESTMOOOOOOOOO!!!!!!! Tu ests finisher com jo!